Entre la Luna, el Amor y la Nada

Y miras entre las nubes a la oscura noche, y divisas, sí, divisas tu horizonte.  

Entonces, el eco de los latidos de tu corazón se enmudece y habla sin sentido.

Y tú miras, miras con los ojos cerrados, miras las estrellas esas que piensas brillan por ti. 

Las nubes se hacen lluvia y el agua se disfraza de lágrimas. 

Y divisas, miras, miras a la Luna, le pides a la Luna que cuidara esos ojos que te veían con amor. Pero eres ciega, miras sin saber qué amar. 

Y entonces miro a la Luna, esa que le pedía a las estrellas que te velaran, esas que hoy ya no deseas mirar. 

Y el espejo de tus ojos muestran tu ego, tu frivolidad y desapego. 

Y divisas, miras y divisas sin siquiera saber qué percibes. Sólo te queda esperar sin llorar... y mirar.