lunes, febrero 05, 2024

El juego de la realidad 


Muchas veces juego con mi realidad, ahora mismo sé que existo porque me reflejo en el amor que te ofrezco. 

Y así pues, tú y yo, seamos lo que el amor nos dice, creamos una realidad alterna a la vida donde todo es bello excepto por ti, que eres inconmensurablemente más linda. 


Creemos la realidad donde solo lo que necesitamos este con nosotros…esa donde tus sueños de  mirar al alguien, esperarlo, ver que es alguien que amas y que a la vez el otro te ama, sea el ideal. 


Miremos al Sol esperando que nos llene de su luz, esa que hace brillar tus ojos y verme a través de tus pupilas. Juguemos con el viento, ese que acaricia tu hermoso cabello mientras no estoy junto a ti. Juguemos y creemos nuestra verdad, esa que nadie más puede diseñar. 


Juguemos con la tierra, nutramos nuestras ideas, plantando vivencias para luego cosechar éxitos.  Juguemos a crear el amor en esta ilusión llamada vida, seamos tú y yo Ariadna. 

Seamos un juego infinito que solo sabemos entender nosotros. 

Dime, cómo puedo evitar extrañarte, cómo puedo dejar de pensar en tus besos, cómo. Si eres lo más preciado de esta experiencia llamada vida.


Cómo puedo dejar de sentir amor y lindura por ti, si contigo la felicidad se expande más allá del universo y confluye con los otros.


De qué otra forma tendría que vivir, si eres con quien más he anhelado vivir la vida. 


Cómo, dime cómo podría estar sin ti. 


De qué forma serían los días sin escuchar tu voz, de que manera entendería a la gente sin percibir tu felicidad. De qué valdría seguir intentando ser mejor si no podría compartir mis experiencias a tu lado. 


Cómo sería el volver a los lados dónde te vi o besé. Cómo cambiaría la vida si no escuchara tu risa. Cómo, dime cómo podrían ser los días sin ti. 


De qué manera tendría que engañarme para así conformarme con el hecho de que regresarías. De qué modo los pájaros trinarían, pues al verte pasar, cantaban por tu brillo tal como si fueras el mismo Sol. 

Cómo, cómo sería todo…


Dime, cómo pasaría enero sin ti, acordándome que a los nueve días de ese mes, siempre festejaba el que estés aquí. 

Dime qué sería la playa, la montaña, la tierra y el agua sin tus recuerdos, sin tus acciones. Ellos seguirían pero yo no. 

Cómo podría yo estar así, dime. 


Por eso sigo y deseo estar a tu lado, viviendo la vida, siguiendo al amor, pues sin ti seguro esto tampoco existiría. Cómo o de qué manera seguiré y actuaré, no sé, pero si estoy plenamente seguro que junto a ti Ariadna siempre quiero verme.